Rumbo a Texas
Escrito por Terry el 17 de abril de 2014
Garth Ennis, el irlandés más desvergonzado que puedas conocer, comenzó su andadura en el mundo del cómic en 1989 en Troubled Souls dentro de la antología Crisis. Esta serie contaba la historia de un joven y apolítico protestante que se ve envuelto por avatares del destino en los conflictos de Irlanda. Tras diversos trabajos para esta editorial, se emitió de lleno en la realización de la revista 2000AD donde consiguió rescatar al mítico Juez Dredd.
El primer trabajo que realizó en los EE.UU, fue guionizando durante tres años las andanzas de John Constantine en Hellblazer. Fue en esta época donde conocería a Steve Dillon dibujante con el que realizó la serie de la que vamos a hablar.
El primer número de Predicador ve la luz en 1995 dentro del sello para adultos de DC, Vértigo (donde se han publicado otros cómics como Y, el último hombre, The Sandman, Transmetropolitan etc.), y consta de 66 números regulares, una miniserie dedicada al Santo de los Asesinos y 5 especiales dedicados a ahondar en la historia de algunos personajes secundarios.
Pero, ¿de qué trata Predicador y por qué hay que leer esta magnífica obra? Predicador cuenta la historia de Jesse Custer, un predicador en el pequeño pueblo tejano de Annville que es poseído accidentalmente por una criatura llamada Génesis, que no es otra cosa que el hijo bastardo de un ángel y un demonio. Esta posesión provoca una explosión que acaba con toda la iglesia y los que estaban dentro escuchando la predicación de Custer.
Génesis, es como un niño sin sentido de voluntad individual, pero al estar compuesto tanto por divinidad y maldad puras, podría tener el poder para rivalizar con Dios, por lo que unido a Jesse Custer, se convierte en el ser más poderoso de la creación.
Uno de los poderes que Génesis otorga a Jesse, es el Don de la Palabra, por el cual al usarlo, los que lo escuchen deben obedecen sus órdenes, seas cuales sean a veces con resultados un tanto… Estrambóticos.
Cassidy, Jesse y Tulip
En este momento Custer emprende un viaje por los EE.UU tratando de encontrar al propio Dios, quien abandonó su lugar en el Cielo al nacer Génesis. A él se le unen su antigua novia, Tulip y el alcohólico vampiro irlandés Cassidy.
Como podréis imaginar, el viaje no es una excursión a lo largo del país, sino que se deben enfrentar a diversos enemigos como el Santo de los Asesinos, un ángel de la muerte encarnado en la figura de un pistolero que jamás falla un tiro y que sólo y únicamente responde ante Dios y que ha sido despertado para acabar con Jesse y su amenaza.
Un Santo de los Asesinos cortesía del maestro Carlos Ezquerra
Por otra parte aparece una organización secreta autodenominada el Grial, controladora de los más importantes gobiernos del mundo y que protege con fervor el linaje de Jesucristo; Herr Starr, aparentemente Patriarca del Grial, un megalomaníaco con una obsesión por las prostitutas, que desea a Custer para sus propios fines.
Tal es el escenario en el que Garth Ennis narra un auténtico western al más uro estilo de las películas de John Wayne (el cuál tiene una importante participación dentro de la historia, al ser una especie de figura paterna para Jesse), tratando temas tan delicados como pueden ser la existencia de un linaje de Cristo (aunque no de la forma que muchos hubieran deseado que fuera tratado).
Como he dicho, el cómic se trata de un maravilloso western, teniendo grandes influencias de películas como Sin Perdón (en la figura del Santo de los Asesinos) y en él también se analizan diversos aspectos de la cultura norteamericana, vistos desde un punto de vista externo, ya que ni Ennis ni Dillon son americanos, lo que puede dar lugar al uso de tópicos sobre todo en el caso del sur de Estados Unidos donde transcurre la acción, formando parte del humor negro que rodea toda la serie
Incesto, violencia, sexo, humor negro, son los ingredientes que invaden esta gamberrada convertida en obra maestra y en la que no puedo terminar sin mencionar al personaje más “entrañable” que es Caraculo, un joven que imitando a su ídolo Kurt Cobain se dispara con una escopeta en la cara, sobreviviendo al suicidio aunque con la cara deformada, lo que hace que Jesse al verle diga sorprendido que tiene el culo en la cara…
Esto… Caraculo
Durante muchos años se ha hablado que la HBO iba a realizar una serie sobre este cómic, hablándose incluso de Samuel L. Jackson (este hombre está en todos los fregados) como el Santo de los Asesinos, sin embargo en 2008 los nuevos ejecutivos de la cadena dijeron que descartaban el proyecto al encontrar la historia «estéticamente demasiado oscura y religiosamente controvertida».
Sin embargo, a principios de este año se confirma que AMC llevará Predicador, a la pequeña pantalla, bajo la batuta de Sam Catlin, implicado en Breaking Bad, y con colaboración de Seth Rogen y Evan Goldberg.
Debo advertir que no es un cómic par todos los públicos, Ennis ha confesado muchas veces su odio hacia la religión, por lo que se mofa de ella, de una forma elegante pero ácida lo que puede ofender a los más conservadores del lugar. Por eso os recomiendo leerla tranquilamente, disfrutar de las burradas que suelta, reíros ante todo, porque al fin y al cabo hasta Dios tiene sentido del humor, sino fijaos en los ornitorrincos.
¡Leed muchos tebeos!
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